Me encantó mi escapada romántica en este hotel. Lo que más me gustó fue la ubicación privilegiada, con vistas espectaculares desde todas las habitaciones. También disfruté mucho del servicio de traslado gratuito al garaje, que fue muy puntual y conveniente. Además, el desayuno fue muy bueno, con una pianista tocando en vivo, lo cual añadió un toque especial.

También hubo algunas cosas que no me gustaron tanto. Por un lado, mi habitación estaba situada en una dependencia alejada del hotel principal, lo cual resultó un poco incómodo.

Solemos quedamos allí y definitivamente volveríamos a reservarlo, todo es excelente. Está al lado de Via Ridola...

Es fácil llegar a Via Ridola, está a solo 500 metros del hotel. Hay una buena opción de comida a 200 m - La Gattabuia. El barrio Sassi di Matera no te decepcionará.

Desayuno maravilloso, habitación hermosísima y cómoda, vista encantadora, fácil acceso al hotel, habitaciones originales en cuevas.

Nada que no me haya gustado.

La ciudad.

No son muy amables. El desayuno es muy justo. Los niños no son bien tolerados.

Me ha gustado todo. Es un hotel excelente para conocer Matera, un justo Patrimonio de la Humanidad.Su piscina climatizada es una joya.

el lugar está muy bien situado y la ambientación es excelente. Mis hijos quedaron encantados con la vista encantadora de la ciudad desde la hermosísima habitación. El desayuno fue maravilloso, variado y exquisito. El acceso al hotel fue fácil y cómodo, dejamos el auto en el estacionamiento y ellos nos acercaron al hotel por poco dinero.

El desayuno resultó un poco incómodo ya que había que pedir las cosas y te las servían, prefiero los sistemas donde puedes servirte directamente tú.

Las vistas del centro del casco antiguo desde el hotel son impresionantes. La ubicación es perfecta, cerca de todo y en el centro de las cosas. El desayuno es delicioso, con productos típicos de la zona. El personal es amable y atento.

De verdad no hay nada que no me haya gustado. No tengo ninguna queja.

Ubicación: el hotel estaba no muy lejos de la plaza principal, del centro de la ciudad y del casco antiguo. A veces hacía calor afuera, así que íbamos a Il Rusticone, y comíamos algo allí. Nos han gustado sus habitaciones con vistas. Teníamos una nevera y una estufa.

Me ha gustado mucho de verdad el lugar, lujoso y romántico para una noche. La habitación era práctica, con un buen diseño, abastecida y tenía un refrigerador minibar y una mesa de trabajo. El desayuno era mejor de la media con música de piano en directo, la piscina era preciosa.

Ubicación inmejorable. Habitación amplia y cómoda.3. Piscina del SPA agradable.4. Desayuno completo y variado.5. Ambiente encantador y rústico.6. Personal atento y amable.7. Diseño del hotel muy bien logrado.8. Limpieza impecable

Todo bien.

Los cuartos son bonitos, y el desayuno mejor de la media y completo.

El hotel es fantástico. Las habitaciones están excavadas en la roca, tienen el encanto de lo antiguo y además todas las comodidas modernas. Al salir del cuarto te encuentras directamente en la calle y la vista sobre la ciudad es impresionante. Además tiene un spa precioso, muy grande y todo limpísimo con piscinas, saunas, duchas y un baño turco. Recomiendo muy vivamente pasar un par de horas en el spa. El buffet del desayuno no es enorme pero está muy bien. Tienen pan sin gluten que es nuestro problema, frutas, quesos, embutidos. El personal muy amable. Casi perfecto.

El servicio de parking tiene un costo y el acceso a veces es complicado. 😔

La relación calidad-precio de este hotel es excelente. Las habitaciones son espaciosas, acogedoras y bellas, con un diseño propio de las casas típicas de la zona pero con todas las comodidades modernas. Además, la ubicación en el centro de todo es perfecta para explorar la ciudad.

Todo estuvo bien, nada que pudiera ser mejorado.

La suite era evocadora y la comida estaba fresca. Camas acogedoras. En general un lugar sensacional y único justo al lado del centro de la ciudad vieja y de muchos buenos restaurantes y también del centro. Situado a 1 km del Tramontano castle.